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Lanzarote

De EnciclopediaGuanche

Para otros usos de este término, véase Lanzarote (Valleseco).

Lanzarote Bandera de Lanzarote

Mapa-Situación de Lanzarote

Fotografía de satélite de Lanzarote

Archipiélago: Islas Canarias Flag of the Canary Islands.jpg

Coordenadas: 29° 2′ 56″ N 13° 37′ 12″ O

Superficie: 845,94 km2

Altitud máxima: 607 m (Peñas del Chache).

Tipo:

Capital: Arrecife

Población: 141.932 habitantes (2009)

Densidad: 167,78 hab./km2

Gentilicio: Conejero/a

Presidente del Cabildo: -

Partido: -

Bandera de Lanzarote


Destacado.jpg

Lanzarote es una isla situada en el Océano Atlántico frente a las costas africanas, y que forma parte del archipiélago canario. La capital de la isla es Arrecife. Pertenece a la provincia de Las Palmas (Comunidad Autónoma de Canarias).

El nombre Lanzarote le puede venir del marino genovés Lanceloto Malocello, quien visitó la isla en el siglo XIV. Destacado.jpg


Descripción

Lanzarote es la más septentrional y oriental de las islas del archipiélago canario. Es conocida popularmente como "la isla de los volcanes", al identificarse con el manto volcánico que se extiende a lo largo de gran parte de su superficie debido a la gran actividad volcánica de principios del siglo XVIII.

Lanzarote se encuentra a una distancia de 140 km de la costa noroccidental africana y a 1000 del punto más cercano del continente europeo, el sur de la Península ibérica. Su punto más septentrional es el cabo o Punta Fariones, y el más meridional, Punta del Papagayo. Su clima es subtropical con escasas precipitaciones. Tiene una superficie de 845,93 km² y una población de 141.938 habitantes (INE, enero de 2009 [1]). Consta de siete municipios de los cuales el más poblado es Arrecife, capital insular. Al norte de la isla se encuentran los islotes e islas menores de Alegranza, La Graciosa, Montaña Clara, Roque del Este y Roque del Oeste, que forman el Archipiélago Chinijo, administrativamente dependiente de Lanzarote.

Las Peñas del Chache, situado en Haría, con 670 m de altitud, es el pico más elevado de la isla. Lanzarote fue declarada en 1993 Reserva de la Biosfera por la Unesco. Además, la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos recoge en esta isla un total de 13 entornos naturales, que suponen más del 40% del territorio insular, entre los que destaca el Parque Nacional de Timanfaya.

Dedicada en el pasado fundamentalmente a la agricultura y la pesca en el banco pesquero canario-sahariano, en la actualidad la economía de la isla gira en torno al sector servicios, fundamentalmente a la potente industria turística. A esta actividad comienza a añadírsele la viticultura, de importante peso en siglos anteriores y que se ha relanzado con la creación de la Denominación de origen para los vinos de Lanzarote.

La isla cuenta con el Aeropuerto de Lanzarote-Guacimeta, en el municipio de San Bartolomé; así como con los puertos marítimos: Puerto de los Mármoles en el municipio de Arrecife, y el puerto de Playa Blanca en el municipio de Yaiza.

La explicación del nombre de la isla de Lanzarote es de las más claras y aceptadas de todos los topónimos del archipiélago canario. Existe consenso entre los historiadores en que el nombre procede del navegante genovés Lanceloto Malocello, quien la visitó por primera vez en el primer tercio del siglo XIV y de cuya presencia, al parecer, encontraron alguna huella los primeros conquistadores normandos: el castillo de Guanapay, el más antiguo de Lanzarote, se habría construido sobre una antigua torre edificada en 1312 por Malocello. La isla se denomina "Insula de Lançarotus Marocelus" en el primer portulano que recoge a las Islas Canarias más o menos en su forma actual, el del mallorquín Angelino Dulcert, de 1339. En otras cartas y mapas posteriores esta denominación sufre alteraciones fonéticas, pero no cabe duda de que el nombre actual deriva del ilustre visitante italiano que en su día recaló en ella.

El vocablo aborigen Titerogakaet parece que fue el empleado por los majos para referirse a la isla con anterioridad a su conquista. Se trata de un término de origen bereber que ha sido emparentado con el tuareg tetergaget, "la que está quemada", o bien con los vocablos titerok y akaet, que significarían "Montaña Colorada". Del mismo modo, la toponimia insular está plagada de voces de origen indígena, como Yaiza, Tinajo, Teguise, Timanfaya o Guatiza, que comparten protagonismo con lugares de nombre hispánico como San Bartolomé o Puerto del Carmen.

Paisaje y orografía

Clima

Charco Verde, Yaiza.

El clima de Lanzarote se define como subtropical en lo que se refiere a sus temperaturas y seco o subdesértico respecto a las precipitaciones. Las temperaturas experimentan escasas variaciones tanto entre las diferentes estaciones como entre el día y la noche, gracias a la acción moderadora del océano. La temperatura media del mes más frío (enero), a nivel del mar, es de 17 °C y la media del mes más cálido (agosto) es de 24 °C. Las temperaturas no suelen bajar de los 14 °C en invierno ni suelen ser superiores a los 29 °C en verano. Por su parte, la media de precipitaciones es de unos 200 mm anuales, concentrándose en los meses de invierno y siendo prácticamente nulas entre mayo y octubre. Las precipitaciones varían de los 250 mm en Famara a tan sólo 50 mm en la zona de la Costa del Rubicón. El clima es mucho más templado de lo que correspondería por su latitud geográfica. Estos son los parámetros meteorológicos habituales en la capital de la isla:

Gnome-weather-few-clouds.svg  Parámetros climáticos promedio de Arrecife, España WPTC Meteo task force.svg
Mes Ene Feb Mar Abr May Jun Jul Ago Sep Oct Nov Dic Anual
Temperatura máxima media (°C) 21.1 22.2 22.2 22.2 22.8 23.9 25.0 26.1 26.1 26.1 24.8 22.2 23.7
Temperatura mínima media (°C) 13.9 13.9 15.0 16.1 17.2 17.8 18.9 21.1 21.1 18.9 17.8 16.1 17.3
Precipitación total (mm) 25.4 17.8 12.7 5.1 2.5 0.0 0.0 0.0 2.5 5.1 15.2 25.4 111.8
Fuente: The Weather Channel Interactive, Inc. Marzo 2009
Episodio de calima o siroco en Canarias. La cercanía entre Lanzarote y la costa continental africana favorece este fenómeno atmosférico

Hay dos elementos climáticos que determinan la benignidad atmosférica: los alisios y la corriente fría de Canarias. El viento es prácticamente permanente en la isla. Un fenómeno relativamente frecuente es la presencia de vientos procedentes del desierto del Sáhara, que arrastran grandes cantidades de polvo en suspensión. La cercanía de Lanzarote con la costa continental africana hace que estos fenómenos de siroco, también denominado calima o "tiempo sur" en Canarias, se hagan notar especialmente en la isla, alcanzándose temperaturas de hasta 46 °C (2004) y visibilidad muy reducida.

Existen excepciones, la meseta central de la isla, entre los 200 y los 300msnm, es sensiblemente más fría con temperaturas máximas en enero que no superan los 14-15 °C de máxima y mínimas de 8 °C o inferiores. En verano, las máximas en el área de Lanzarote central oscilan en torno a los 22-24ºc de máxima y los 15-16 °C de mínima, con un elevado nivel de humedad relativa y un viento del NNE entre moderado y fuerte, reduciendo la visibilidad.

Lanzarote está inmersa en la zona climática cálida y seca que se corresponde con su latitud, incluida en el cinturón de altas presiones subtropicales. Su clima es subdesértico, se caracteriza por tener un régimen pluviométrico escaso (pluviosidad menor a 200 mm anuales), atribuible fundamentalmente a la especial orografía de la isla, ya que su escasa altura impide la retención de la humedad que contienen los vientos alisios, con excepción de las zonas más altas (Los Ajaches y los Riscos de Famara). Esta característica impide la existencia de lluvias orográficas, tan abundantes en las islas occidentales, ya que no existen obstáculos montañosos de envergadura que puedan detener el llamado «mar de nubes».

Geología

Playas de Papagayo y macizos de los Ajaches, al sur de la isla

Lanzarote, como todas las demás Islas Canarias, es el efecto de los procesos geológicos derivados de la apertura del Atlántico, iniciado en el Mesozoico, y agravado más recientemente por la presión existente en esta zona generado por el giro de África en el sentido de las agujas del reloj iniciado en la orogenia alpina del Terciario. Al comienzo de la apertura del Atlántico, comenzaron las emisiones de lava sin aflorar a la superficie hasta hace unos 20 millones de años en la vecina Fuerteventura y 11 millones de años en la isla de Lanzarote.

La historia geológica de Lanzarote se divide en tres fases:

  1. En una primera fase, hace 11 millones de años, durante el Mioceno, aparecen los restos más antiguos en la zona de Famara, al norte de la isla, y en los Ajaches, al sur. Actualmente, los procesos erosivos han desmantelado estas formaciones. Su morfología es la de edificios erosionados que han evolucionado a formas acarcavadas con una buena red de drenajes caracterizados por valles en forma de “U” actualmente secos y áridos. Característico de estas formaciones es el risco de Famara, donde se encuentra el mayor desnivel en la isla, unos 600 m. El punto más alto de Lanzarote se encuentra aquí, en las peñas del Chache con una altura de 671 m.
  2. Una segunda fase es la que abarca la evolución de la morfología de Lanzarote desde el Mioceno hasta el Pleistoceno, que se caracterizó por los procesos erosivos de las dos formaciones, Famara y Ajaches. Posteriormente, han existido emisiones importantes de material magmático que han dado lugar a la unión de las dos formaciones antiguas. Se trata sobre todo del sector central de la isla que se caracteriza por la existencia de alineaciones de edificios formando los ejes estructurales de la isla, que coinciden con los los ejes de formación de Fuerteventura con dirección NE-SO, algunos con avanzado estado de desmantelamiento, con una evolucionada red de drenaje en formas redondeadas, amplios valles, vegas y moderadas penillanuras. Cabe decir que en esta etapa Lanzarote y Fuerteventura estaban unidas por el estrecho de la Bocaina y por la isla de Lobos. La última vez que lo estuvieron fue durante la última glaciación, la glaciación de Würm.
  3. La tercera fase, geológicamente hablando, no tiene nada característico, aunque es la más importante desde el punto de vista antropocéntrico. Se trata de erupciones acaecidas en los siglos XVII y XVIII con emisiones alineadas paralelas a las de la anterior fase y edificios que no superan los 200 m. pero excelentemente conservados por la poca pluviosidad que se da en la isla y por una política de conservación muy estricta.[2]

Naturaleza

Lanzarote cuenta con una espectacular naturaleza, tanto en lo que se refiere a paisajes, siendo estos uno de sus principales atractivos turísticos, como en cuanto a la flora y la fauna insular, plagada de endemismos. Además, la isla ha estado a la vanguardia de Canarias en lo referente a conciencia ambiental, como demuestra su pionero marco legal para la ordenación del territorio o la negociación de moratorias para la construcción, intentando lograr un perfecto equilibrio entre desarrollo turístico y preservación del medio natural. Todo ello se vería recompensado con la declaración de la isla como Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1993. En la actualidad, el 42% del territorio de la isla se encuentra protegido bajo alguna de las figuras de conservación que contemplan las leyes canarias.

Paisajes y espacios protegidos

Cinco hitos geográficos marcan la morfología de Lanzarote, dotándola de una personalidad única y albergando cada uno de ellos paisajes diversos, de gran valor natural y geológico. Se trata de dos macizos montañosos de gran antigüedad, ubicados cada uno de ellos en el extremo norte y sur de la isla (Famara-Guatifay y Los Ajaches, respectivamente); dos áreas de vulcanismo más reciente, que conforman la zona de volcanes de Timanfaya,en el centro-sur, y el volcán y malpaís de La Corona, al norte; y, finalmente, una lengua de arenas de origen marino que atraviesa el centro de la isla, en el área conocida como El Jable. Estos cinco espacios, junto al conjunto de islotes del Archipiélago Chinijo, al norte de la isla, albergan la mayor parte de los encantos paisajísticos de la "isla de los volcanes".

Zona de Timanfaya

El diablo de Timanfaya, diseñado por César Manrique, símbolo del Parque Nacional
Horno asador o Vulkan Grill Timanfaya

Encuadramos aquí al conjunto de espacios sepultados o surgidos a partir de las erupciones de Timanfaya, acaecidas entre 1730 y 1736, y que ocupan aproximadamente una cuarta parte de la superficie de la isla. En el centro de esta zona se encuentra el área de mayor interés geológico y paisajístico, el Parque Nacional de Timanfaya, declarado como tal en agosto de 1974. Se trata de una superficie de algo más de 50 km² en la que se pueden observar más de 25 volcanes, aparte de campos de lavas, lapillis y escorias volcánicas en perfecto estado de conservación. En su interior se encuentra el Monumento Natural de las Montañas del Fuego, donde se ubica el centro de visitantes del Islote de Hilario, gestionado por el Cabildo. Este espacio conserva aun cierta actividad volcánica, como demuestran las emanaciones de calor que produce la tierra.

El Parque Nacional está rodeado por un segundo espacio protegido, el Parque Natural de Los Volcanes, sepultado también por las erupciones de Timanfaya. Las lavas llegaron a las costas occidentales de la isla, penetrando en el Océano y aumentando la extensión de Lanzarote. El rápido enfriamiento de la lava al contacto con el agua, unido a la acción erosiva de las olas, creó un peculiar paisaje costero. Ejemplo de ello es el lugar conocido como Los Hervideros, cerca de la población de El Golfo. En sus inmediaciones se encuentra el Charco verde o de los Clicos, una extraña laguna de agua marina con tonalidades verdosas a causa del fitoplancton que habita en su interior.

Vista de La Geria

Lindando con el parque natural se halla el paraje de La Geria, muestra de una perfecta simbiosis entre el ser humano y la naturaleza. En La Geria el campesino lanzaroteño ingenió un sistema agrícola único en el mundo con el que pudo cultivar las tierras que habían quedado calcinadas por las cenizas volcánicas. Estas cenizas, llamadas en Canarias picón, retienen la humedad ambiental durante la noche y la filtran hacia la tierra que se encuentra debajo, al tiempo que aíslan a ésta durante el día. Un estrato calizo inferior impide que el agua continúe hacia el subsuelo. El sistema posiblita el cultivo de la vid en un espacio de clima subdesértico. Para ello, los agricultores tuvieron que buscar bajo el lapilli la "tierra madre" que había quedado sepultada, plantar en ella las cepas, cubrir con capas de picón y construir muros de piedra vocánica que resguardasen a las parras del fuerte viento de la zona. Esto dio como resultado un paisaje excepcional, donde se producen los acreditados vinos de Lanzarote, fundamentalmente a partir de la uva malvasía.

Volcán y malpaís de La Corona

Aljibe a los pies del Volcán de La Corona, en Haría, Lanzarote.
Cultivos y Volcán de la Corona, al norte de Lanzarote

El Volcán de La Corona es un gran cono volcánico situado al norte de la isla, en el municipio de Haría. De él proceden las lavas que constituyen el malpaís de La Corona. Dada su relativa antigüedad, de unos 21000 años, este espacio, al contrario de lo que ocurre en los campos de lavas de Timanfaya, ha sido colonizado por gran número de especies vegetales mayores, entre las que destacan la tabaiba dulce y el verode.

Por el subsuelo del Monumento Natural del Malpaís de La Corona discurre un extenso tubo volcánico de más de 6 kilómetros de longitud, que va desde el cono volcánico hasta el mar, adentrándose en él, formando un túnel submarino de un kilómetro y medio llamado Túnel de la Atlántida. Dos de los tramos de este conjunto de galerías están habilitadas para las vistas turísticas. Se trata de la Cueva de Los Verdes y los Jameos del Agua.

El Jable

Se conoce como "El Jable" a la lengua de terrenos cubiertos de arenas organógenas que discurre por la parte central de la isla, desde las playas de Famara hasta depositar las partículas arenosas en las zonas costeras en torno a las cuales se han levantado los núcleos poblacionales y turísticos de Puerto del Carmen, Playa Honda y Arrecife. Estos paisajes son el resultado de la peculiar orientación del Macizo de Famara, que impone a los vientos alisios dominantes una inflexión en la zona noreste, y pasan a convertirse en vientos del noroeste. Las arenas penetran en la isla por la extensa playa de Famara, formando en este entorno paisajes dunares de gran interés paisajístico y biológico, siendo esta zona área de nidificación de especies en peligro como la hubara canaria.

Playa de Famara, con el risco al fondo

Famara-Guatifay

El extremo norte de la isla está delimitado por el macizo montañoso de Famara-Guatifay, sobre el que se sitúa la máxima elevación de Lanzarote, las Peñas del Chache (670 m de altura), y que se precipita hacia el mar en un inmenso acantilado conocido como el Risco de Famara. Se trata de una de las formaciones geológicas más antiguas de la isla y del conjunto del Archipiélago canario, constituida por un importante apilamiento de coladas basálticas fisurales. Los riscos y el macizo de Famara tienen gran importancia desde un punto de vista bilógico, convirtiéndose por sus peculiaridades y por el difícil acceso en verdaderos santuarios naturales, con gran cantidad de endemismos vegetales y especies en peligro de extinción. Desde la parte superior del Risco de Famara se obtiene una vista panorámica inigualable de la isla de La Graciosa, separada de Lanzarote por un estrecho brazo de mar conocido como El Río. Precisamente esta fue la zona elegida por el artista lanzaroteño César Manrique para ubicar el Mirador del Río, desde el que se captan las mejores vistas del Archipiélago Chinijo.

Macizo de los Ajaches

Ubicado al sur de la isla, y con una antigüedad de 20 millones de años, se encuentra el macizo de Los Ajaches, zona de gran interés geológico y paisajístico. Este espacio ha sido declarado Monumento Natural por la Administración canaria. En su entorno se encuentran unos de los principales atractivos turísticos de la isla, las playas de Papagayo, de arenas blancas, con vistas al islote de Lobos y a la vecina isla de Fuerteventura.

Flora

Lanzarote cuenta entre su flora con 16 endemismos exclusivos de la isla, a los que se suman otros 30 exclusivos de las islas orientales, 41 de los endemismos canarios y 19 endemismos macaronésicos.

La tabaiba dulce, símbolo vegetal de Lanzarote

La escasa altitud de la isla —670 m en su punto máximo— no permite el desarrollo de formaciones nubosas asociadas al viento alisio —fenómeno conocido en Canarias como mar de nubes— por lo que se reduce el número de pisos bioclimáticos con respecto a las islas más altas del archipiélago, más variadas en cuanto a microclimas. Así pues, en Lanzarote podemos distinguir un primer piso de vegetación asociado a las zonas costeras e intermareales, con especies adaptadas a condiciones extremas de salinidad e insolación, como el mato y las uvas de mar. Un segundo piso corresponde a los tabaibales. La tabaiba dulce es un endemismo canario propio de las zonas bajas y secas, que por su profusión en Lanzarote fue declarada como símbolo vegetal de la isla. El principal tabaibal de Lanzarote se encuentra en el malpaís de la Corona, al norte de la isla. En un piso superior de vegetación se encuentran las zonas dominadas por la palmera canaria.

Museo de Aloe de Lanzarote situado en el pueblo de Arrieta.

El principal palmeral de la isla se encuentra en Haría, en el llamado "Valle de las Tres Mil Palmeras", un verdadero oasis al norte de la isla. En la isla asimismo existen diversas especies de aloe ya que se da un clima apropiado para el crecimiento de esta planta. Lanzarote cuenta con un Centro de interpretación del Aloe, único centro de estas características en Canarias.

Otro aspecto que ha influido sobre la vida natural de la isla ha sido los diferentes episodios volcánicos, que se han sucedido hasta épocas muy recientes. Así, mientras las zonas volcánicas más antiguas, como el malpaís de la Corona, han sido pobladas por especies arbustibas como la tabaiba o el verode, las más recientes sólo admiten por el momento la colonización de comunidades de líquenes y briófitos, convirtiéndose zonas volcánicas como Timanfaya en auténticos "laboratorios de vida".

Fauna

Ejemplar de "jameito" ,Munidopsis polymorpha, cangrejo albino y ciego exclusivo del tubo volcánico de Los Jameos del Agua

La fauna vertebrada de Lanzarote, como en el resto de Canarias, está dominada por la aves, de las que se conocen actualmente 40 especies nidificantes, frente a 3 de reptiles y 6 de mamíferos. Entre las primeras destacan el cernícalo, el alcaudón real, el alcaraván o la hubara canaria. El Macizo de Famara, acatilado de 600 m de altura y 14 km de longitud es un santuario de especies, muchas de ellas amenazadas. Allí perviven los últimos alimoches de la isla, llamados guirres en Canarias, así como águilas pescadoras (guinchos) o halcones de berbería. La riqueza avícola se extiende también por los cercanos islotes del Archipiélago Chinijo, donde destaca la presencia de pardelas cenicienta.

Los reptiles más característicos de la isla son el lagarto atlántico y el perenquén majorero.

En cuanto a los invertebrados cabe detacar al llamado "jameito" Munidopsis polymorpha, un cangrejo diminuto, albino y ciego, exclusivo de la laguna de agua salada existente en el tubo volcánico de Los Jameos del Agua, del que toma su nombre.

Finalmente, cabría apuntar la riqueza de la fauna marina, especialmente protegida en la Reserva Marina del Archipiélago Chinijo, al norte de la isla.

Símbolos naturales de la isla

Según una ley del Gobierno de Canarias, los símbolos naturales de la isla son el cangrejo ciego y la tabaiba dulce.[3]


Historia

  Artículo principal: Historia de Lanzarote

Población aborigen de Lanzarote

La isla esta poblada desde hace al menos dos milenios. Los habitantes de la isla se conocen genéricamente como mahos o mahoreros, siendo estos un pueblo bereber. La hipótesis más probable sobre el poblamiento de la isla apunta a oleadas migratorias sucesivas desde el norte de África. El nombre original de la isla es Tyterogakat o "Tytheroygatra", que se ha traducido como la quemada empleando un topónimo geográfico bereber tuareg de Argelia central.

Fuentes

Grabado de la expedición de Jean de Bethencourt y Gadifer de la Salle a la Isla de Lanzarote

Las descripciones que hicieron los primeros europeos que visitaron la isla en la Baja Edad Media hablan de hombres de raza blanca, altos, musculosos, de gran belleza, y había muchos rubios entre ellos...., si bien estas descripciones ofrecían una visión bastante idealizada de . Los datos que se conocen de los aborígenes de la isla son indirectos y poco fiables. La fuente documental más importante es “Le Canarien”, el relato escrito por los capellanes domésticos de los franco normandos Juan de Bethencourt y Gadifer de la Salle durante la invasión de la isla en 1402. Aunque existen algunas inscripciones aborígenes con una escritura tifinagh, estas no han podido ser traducidas. Las fuentes arqueológicas son imprescindibles para lograr un mayor conocimiento acerca de estas sociedades.


Economía y sociedad

Los antiguos mahos vivían del pastoreo, el marisqueo de orilla , la recolección de frutos y tenían una agricultura muy limitada. No conocían los metales y habían perdido los conocimientos sobre la navegación oceánica. Vivían en cuevas o chozas de piedra semienterradas (casas hondas), vestían pieles de cabra sin curtir y se alimentaban de gofio , carne de cabra y pescado. Casi todas las crónicas recogen su carácter apacible y hospitalario y su afición por la música y el baile.

La organización social estaba adaptada a la condiciones de la isla, pobre en recursos de todo tipo. La jerarquía era patriarcal y hereditaria, ejercida por reyes o “menceyes” que eran elegidos por los nobles, y la justicia extremadamente dura según los primeros visitantes europeos, se administraba en la plaza pública o “tagoror”. Otros datos acerca de la estructura social indican una adaptación a la escasez permanente de recursos. La procreación estaba limitada por el infanticidio femenino, práctica utilizada para lograr un control poblacional en una isla de recursos escasos. Probablemente fruto de la práctica del infanticido femenino, en determinado momento la población femenina llega a ser menor que la masculina, lo cual llevaría a que se dieran casos de poliandría en los que cada mujer tenía tres maridos que se turnaban mes a mes (triandria), esto podría suponer, por otro lado, unas normas de residencia matrilocales.

La conquista de Lanzarote

Las isla de Lanzarote era conocida en el mundo antiguo. Fue visitada por los Fenicios, que buscaban la orchilla, el preciado tinte rojo que crece en las rocas orientadas al norte de la isla. El único testimonio documental de la epoca medieval, muy dudoso, es el famoso viaje de San Borondón. En 1312 el navegante genovés Lanceloto Malocello redescubrió la isla de Lanzarote para Europa y le dió su actual nombre, que aparece por primera vez en el mapa portulano de Angelino Dulcert en 1339. Durante los siguientes cincuenta años se organizan varias expediciones, más bien razzias, que buscan esclavos, pieles y tintes. Comienza con esto el declive de la población aborigen. En 1377 el vizcaíno Ruiz de Avendaño, comandante corsario de la flota castellana, naufraga tras una tormenta en la isla de Lanzarote, donde es recibido por el rey Zonzamas , que le ofrece la hospitalidad de lecho con la reina Fayna . De esta relación nace la princesa Ico, blanca y rubia, madre del último rey de Lanzarote , Guardafia. En 1393, el noble castellano Almonáster llega a Lanzarote .Cuando regresa a la península lleva consigo nativos y algunos productos agrícolas.

Las primeras expediciones europeas de saqueo en busca de esclavos recalaban primero en Lanzarote y La Graciosa por ser las islas más cercanas a la península ibérica. Esto contribuyó a una disminución demográfica durante el siglo XIV, de manera que cuando llegaron las primeras expediciones de conquista la población estaba en claro retroceso.

La conquista definitiva de la isla se produce con la expedición de los mercenarios y aventureros normandos Juan de Bethencourt y Gadifer de la Salle, al servicio de Enrique III de Castilla. Cuando llegan a la isla en 1402 quedan solo 300 nativos y los expedicionarios se establecen en la Costa del Rubicón, en el sur de la isla. Después de el intento fallido de conquistar Fuerteventura, Bethencourth vuelve a Castilla y le es otorgado el señorío de Lanzarote. Cuando regresa la resistencia de los nativos ha sido reprimida a sangre y fuego por Gadifer de la Salle. Tras sucesivos fracasos en la conquista de otras islas y dado el escaso interés comercial que despertaba Lanzarote entonces, Juan de Bethencourt cede el señorío de la isla a su pariente Maciot de Bethencourt.

El señorío feudal

Lanzarote se convierte en un señorío feudal que pasa de mano en mano de los descendientes de Bethencourt a nobles andaluces como el Conde Niebla, Hernán de Peraza y Pedro Barba.

En estos primeros años se llevará a la isla un importante contingente repoblador de origen berberisco, que se fusionará con la población aborigen y con los colonizadores europeos.

Durante las siguientes centurias la isla mantendra una estructura de poder feudal, hasta la abolición del señorío por las cortes de Cádiz en 1812. Dada la cercanía con la costa africana, Lanzarote será objetivo de los ataques de piratas berberiscos y europeos.En 1586 el corsario berberisco Amurat toma la isla con quinientos hombres y captura a la familia del señor. En 1618 Soliman invade y arrasa la isla. Sir Walter Raleigh , durante su última expedición en busca del Dorado, ataca Arrecife en 1617 y arrasa la ciudad. La población se refugia durante los ataques en la cueva de los Verdes.

Historia moderna de la isla

La erupción de Timanfaya

Timanfaya

"El día 1 de septiembre 1730, entre las nueve y las diez de la noche , la tierra se abrió en Timanfaya, a dos leguas de Yaiza...y una enorme montaña se levantó del seno de la tierra", según el testimonio del párroco Lorenzo Curbelo. La isla se transformó por completo. Diez pueblos quedaron enterrados (Tingafa, Montaña Blanca, Maretas, Santa Catalina, Jaretas, San Juan, Peña de Palmas, Testeina y Rodeos) y durante seis años la lava se extendió por la zona sur cubriendo un cuarto de la isla y llenando las vegas cercanas de cenizas volcánicas. En 1824 de nuevo comienzan la erupciones en Timanfaya. Se produjeron terribles hambrunas y la buena parte de la población se vio obligada a emigrar. Desde entonces el paisaje se ha transformado gracias a las técnicas agrícolas de cultivo sobre lapillis volcánicos que los conejeros emplean para captar la humedad de los alisios.

Actividad económica

Durante la segunda mitad del siglo XVIII se introdujo el cultivo de la Barrilla o sosa , una planta rastrera rica en álcalis que se empleaba para la fabricación de jabón. De América llega a Lanzarote el cultivo de la cochinilla en tuneras, la papa y el tomate. La cochinilla fue durante algún tiempo una de la industrias más importantes de la isla. Todavía pueden verse las plantaciones en los pueblos de Guatiza y Mala. De Europa llegan las viñas con las que se fabricara el vino de malvasía, el preferido por el personaje de Shakespeare Falstaff.

Siglo XX

Durante el siglo XX la economía de la isla paso de depender de la agricultura y la salazón de pescado a depender casi esclusivamente del turismo.

La figura de César Manrique fue clave en su momentos para que el desarrollo turístico de la isla no haya destruido el paisaje original, además de ser el creador de algunos de los lugares de mayor interés de la isla: Los jameos del Agua , el Mirador del Rio y el Taro de Tahiche; sin embargo, el modelo desarrollista de los últimos años sí que está produciendo un deterioro del paisaje y del medio ambiente de la isla, pese a que la isla haya sido declarada Reserva Mundial de la Biosfera. Esta economía volcada hacia el turismo y el sector de la construcción ha llevado a Lanzarote de ser una isla que emigraba a ser una isla que vive una enorme inmigración fruto de la cual ha experimentado un espectacular aumento demográfico. Pese a que suela marcarse la inmigración procedente del África continental por las condiciones en que esta tiene lugar, el mayor contingente poblacional procede sin embargo del continente europeo.

Demografía

Demografía

Edificio del Gran Hotel, Arrecife

La demografía insular ha estado marcada en los últimos años por un espectacular aumento de la población. Entre 1996 y 2006, su tasa de crecimiento ha sido diez veces superior al del total de la población española, y el doble que la del total de Canarias. En los últimos 20 años Lanzarote ha duplicado con creces su número de habitantes, pasando de 65.503 en 1988 a 139.506 en 2008. Si a ello sumamos el promedio de turistas que diariamente se encuentran en la isla (48.013 en 2007), la población total ascendería a 180.379 habitantes.[4]

Este vertiginoso aumento poblacional se debe a sobre todo a la inmigración, a la que se debe el 83% del aumento poblacional de la última década. Esto ha hecho que por cada habitante de Lanzarote nacido en la isla haya, en 2007, otro procedente de fuera de la misma. Los residentes con nacionalidad distinta a la española suponen más de la cuarta parte de la población insular, con 36.202 extranjeros censados en 2007. También ha sido numerosa la inmigración desde la España peninsular, con 22.072 censados procedentes de otras Comunidades Autónomas.[5] Las colonias extranjeras más numerosas en la isla son, en este orden, las originarias de Colombia, Reino Unido, Marruecos y Alemania. Pero también inicide en el aumento demográfico el hecho de que Lanzarote registra la tasa bruta de natalidad más alta de Canarias (12,7 por mil) y la segunda tasa bruta de mortalidad más baja (4,3 por mil), después de Fuerteventura, debido a la juventud de su población (índice de juventud del 16,8%, y edad media de 33,2 años), con una alta concentración de edades comprendidas entre los 25 y los 39 años, que suponen casi la mitad del total de la población insular.[6]

La densidad de población de la isla, teniendo en cuenta la población total (población de derecho más promedio de turistas) era de 218 habitantes/km² en 2006, lo que supone más del doble de la media nacional.


Municipios

La isla de Lanzarote está dividida en 7 municipios:

Fiestas

La fiesta con mayor arraigo en la isla es la celebrada en el municipio de Tinajo, cada 15 de septiembre en honor de la Virgen de los Volcanes o de los Dolores (patrona de Lanzarote). En su romería participan gentes venidas de toda la isla.

Referencias

Enlaces de interés