San Marcial del Rubicón
De EnciclopediaGuanche
Tras el Obispado de Telde, San Marcial del Rubicón fue el primer obispado de Canarias situado en la isla de Lanzarote, llamado Ribiscense y posteriormente trasladado a Gran Canaria, a Las Palmas de Gran Canaria denominándose entonces Diócesis de Canarias (también conocida como Diócesis Canariensis o Diócesis Canariense-Rubicense)[1] que en la actualidad comprende las islas de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, en la provincia de Las Palmas. Su patrona es la Virgen del Pino, y su sede está en Las Palmas de Gran Canaria tras haberse dividido en dos al crearse la Diócesis de Tenerife.
El nombre Rubicón deriva del latín rubico, estar rojo, debido a la existencia en esta costa de un volcán de color rojizo, la Montaña Roja, visible desde el mar. La fundación del obispado se produce con los primeros asentamientos normandos de la expedición de Juan de Bethencourt y Gadifer de la Salle en 1402 con vasallaje a Enrique III de Castilla, debido a la existencia de buenos fondeaderos, pozos de agua salobre y la posibilidad de cazar focas monje en la cercana Isla de Lobos.
Referencias: