Acciones

Alfonso XII de España

De EnciclopediaGuanche

(Redirigido desde «Alfonso XII»)
Wikipedia-logo.png :El contenido de este artículo incorpora material de una entrada de la Wikipedia, publicada en español bajo la licencia GFDL.

Alfonso XII de España, apodado «el Pacificador» (Madrid, 28 de noviembre de 1857 – El Pardo, 25 de noviembre de 1885),​ fue rey de España entre 1874 y 1885. Hijo de la reina Isabel II y, presuntamente, del rey consorte Francisco de Asís de Borbón (no es segura su paternidad), el inicio de su reinado puso término a la Primera República y dio paso al período conocido como Restauración. Tras su muerte prematura a los veintisiete años, víctima de la tuberculosis, fue sucedido en el trono por su hijo póstumo, Alfonso XIII, cuya minoría de edad estuvo encabezada por la regencia de su madre, la reina viuda María Cristina.

En 1868, siendo aún un niño, su madre Isabel II fue destronada por la Revolución de 1868 (conocida como La Gloriosa), obligando a la familia real a partir hacia el exilio. Se proclamó en España primero el reinado de Amadeo de Saboya y luego la Primera República Española. Isabel y Francisco de Asís se instalaron por separado en París. La salida a Europa del joven Alfonso supuso una experiencia novedosa, al encontrarse así con otros sistemas políticos como el francés, el austrohúngaro o el británico. De hecho, fue el primer príncipe de Asturias que se formó en centros educativos y militares extranjeros. Aún así, se educó bajo un modelo político bastante conservador.

Mientras tanto, en España se sucedían distintas formas de gobierno: el Gobierno Provisional (1868-1871), la monarquía democrática de Amadeo I (1871-1873) y la I República (1873-1874). Esta fue liquidada en el mes de enero por el golpe de estado del general Pavía, y se abrió un segundo período de gobiernos provisionales. Durante esta etapa histórica (el Sexenio Democrático), la causa alfonsina estuvo representada en las Cortes por Antonio Cánovas del Castillo, quien se había encargado de asegurar una educación acorde con los intereses del líder liberal-conservador.

El 1 de diciembre de 1874, Alfonso hizo público el Manifiesto de Sandhurst, presentándose a los españoles como un príncipe católico, español, constitucionalista, liberal, y "deseoso de servir a la nación".

El 29 de diciembre de 1874 se produjo la restauración de la monarquía al pronunciarse el general Arsenio Martínez-Campos Antón en la localidad valenciana de Sagunto a favor del acceso al trono del príncipe Alfonso. En aquel momento, el jefe del Estado era el general Serrano y el jefe del Gobierno era Sagasta. En enero de 1875 llegó a España y fue proclamado rey ante las Cortes Españolas. Alfonso XII nombró al conde de Morphy su secretario particular.

Su reinado consistió principalmente en consolidar la monarquía y la estabilidad institucional, poniendo fin a luchas internas de los años del llamado Sexenio Revolucionario habían dejado tras de sí, ganándose el apodo de «el Pacificador». Se aprobó la nueva Constitución de 1876 y durante ese mismo año finalizó la guerra carlista, dirigida por el pretendiente Carlos VII (el propio monarca hizo acto de presencia y acudió al campo de batalla para presenciar su final). Los fueros vascos y navarros fueron reducidos y se logró que cesaran, de forma transitoria, las hostilidades en Cuba con la firma de la Paz de Zanjón. En 1878 y 1879 fue víctima de dos atentados perpetrados por anarquistas de los que salió ileso.

En 1885 se desató una epidemia de cólera en Valencia que se fue extendiendo hacia el interior del país. Cuando la enfermedad llegó a Aranjuez, el monarca expresó su deseo de visitar a los afectados, a lo que el Gobierno de Cánovas del Castillo se negó por el peligro que ello entrañaba. El rey partió entonces sin previo aviso hacia la ciudad y ordenó que se abriera el Palacio Real de Aranjuez para alojar a las tropas de la guarnición. Una vez allí, consoló a los enfermos y les repartió ayudas. Cuando el Gobierno conoció el viaje del soberano, envió al ministro de Gracia y Justicia, al capitán general y al gobernador civil para que le llevasen de vuelta a Madrid. Cuando llegó, el pueblo, enterado del gesto del rey, le recibió con vítores y, retirando a los caballos, condujo al carruaje hasta el Palacio Real de Madrid.

Poco tiempo después, el 25 de noviembre, Alfonso XII murió de tuberculosis en el Palacio Real de El Pardo.

La muerte del rey significó el inicio del pacto político entre Cánovas y Sagasta, la denominada "política del pacto" o "política del turno", además de otros pactos, como el militar y el religioso.