Acciones

Diferencia entre revisiones de «Dácil»

De EnciclopediaGuanche

Línea 22: Línea 22:
 
Viana representa a Dácil como una mujer rubia y de ojos verdes que era considerada muy bella, siendo admirada por ello en toda la isla. A la llegada de los castellanos, Dácil estaba prometida a Duriman ''el Montañés''. Sin embargo, el capitán de caballería [[Gonzalo del Castillo]] (a quien Viana denomina erróneamente como Fernán García del Castillo), se enamoró de ella. El oficial castellano fue hecho prisionero y puesto bajo el cuidado de la princesa para que ella pudiera sanar sus heridas, sufridas en [[batalla de Aguere]]. Según varios historiadores, Del Castillo fue un diplomático que dio algunos servicios tanto a los guanches como a los españoles, por lo que era bien considerado por ambos bandos y fue honrado con algunas estimaciones por el Rey de Taoro. Ambos hablaron y se enamoraron en este momento. Sin embargo, los rumores de que ellos habían hablado a solas, una práctica prohibida por la ley guanche, se extendió rápidamente. Duriman, que se sentía rechazado por la princesa, pidió que se formara el Consejo, el cual fue presidido por Bencomo y el gran sacerdote. Tras explicarles que Dácil había hablado a solas con un hombre que era, además, un castellano, y por tanto enemigo de su tierra y de su gente, Bencomo se vio obligado a encarcelarla para cumplir con la ley. Así, ella fue encarcelada durante varios meses. Sin embargo, más tarde, ella fue puesta en libertad gracias a unos testigos que pudieron engañar al rey de que los amantes nunca estuvieron a solas porque alguien estuvo con ellos. La princesa se casó con el conquistador en la Iglesia de la Concepción de [[Los Realejos]]. Luego fue bautizada como Catalina García Izquierdo o del Castillo. Tuvieron cuatro hijos: Diego, Luis, Pedro y María García Izquierdo. Viana no menciona el lugar ni la fecha en que ella murió.<ref name="Antonio de"/>
 
Viana representa a Dácil como una mujer rubia y de ojos verdes que era considerada muy bella, siendo admirada por ello en toda la isla. A la llegada de los castellanos, Dácil estaba prometida a Duriman ''el Montañés''. Sin embargo, el capitán de caballería [[Gonzalo del Castillo]] (a quien Viana denomina erróneamente como Fernán García del Castillo), se enamoró de ella. El oficial castellano fue hecho prisionero y puesto bajo el cuidado de la princesa para que ella pudiera sanar sus heridas, sufridas en [[batalla de Aguere]]. Según varios historiadores, Del Castillo fue un diplomático que dio algunos servicios tanto a los guanches como a los españoles, por lo que era bien considerado por ambos bandos y fue honrado con algunas estimaciones por el Rey de Taoro. Ambos hablaron y se enamoraron en este momento. Sin embargo, los rumores de que ellos habían hablado a solas, una práctica prohibida por la ley guanche, se extendió rápidamente. Duriman, que se sentía rechazado por la princesa, pidió que se formara el Consejo, el cual fue presidido por Bencomo y el gran sacerdote. Tras explicarles que Dácil había hablado a solas con un hombre que era, además, un castellano, y por tanto enemigo de su tierra y de su gente, Bencomo se vio obligado a encarcelarla para cumplir con la ley. Así, ella fue encarcelada durante varios meses. Sin embargo, más tarde, ella fue puesta en libertad gracias a unos testigos que pudieron engañar al rey de que los amantes nunca estuvieron a solas porque alguien estuvo con ellos. La princesa se casó con el conquistador en la Iglesia de la Concepción de [[Los Realejos]]. Luego fue bautizada como Catalina García Izquierdo o del Castillo. Tuvieron cuatro hijos: Diego, Luis, Pedro y María García Izquierdo. Viana no menciona el lugar ni la fecha en que ella murió.<ref name="Antonio de"/>
  
 +
== Véase también ==
 +
 +
* [[Francisca de Tacoronte]]
 +
 +
== Referencias ==
 +
 +
{{reglist}}
  
 
[[Categoría:Guanches]]
 
[[Categoría:Guanches]]
 
[[Categoría:Literatura de Canarias]]
 
[[Categoría:Literatura de Canarias]]

Revisión del 13:34 23 ago 2025

Estatua de Dácil en La Orotava, Tenerife, acompañada de símbolos indígenas correspondiente a la isla de Gran Canaria.

Dácil es un personaje ficticio que aparece en el poema de Antonio de Viana como supuesta hija del mencey Bencomo. En dicha obra literaria se cantan los amores de la "princesa Dácil" con el castellano Gonzalo del Castillo durante la Conquista de Tenerife. Si bien Gonzalo del Castillo existió realmente (participando en la conquista y casándose con Francisca de Tacoronte), el personaje de Dácil es una invención literaria.

Se trata de una de las protagonistas del poema épico Antigüedades de las Islas Afortunadas de Antonio de Viana, publicado en 1604, estando considerada por los historiadores modernos como un personaje ficticio.[1][2][3][4] Para el historiador José Antonio Cebrián Latasa, Viana pudo inspirarse en Francisca de Tacoronte, personaje real que fue guanche y esposa del conquistador Gonzalo del Castillo.[5]

Si bien para algunos autores la etimología de su nombre no es guanche, el filólogo Ignacio Reyes traduce el nombre de Dácil como 'huella, paso'.[6]

Biografía

Familia

Pocos datos fiables se conocen acerca de Dácil. Así, la fecha y lugar exactos del nacimiento y muerte de la princesa son desconocidos. Si bien, el historiador Juan Bethencourt Alfonso y el intelectual Elías González Espínola coinciden en el hecho de que Dácil era hija de Bencomo y que tuvo al menos una hermana, María.[7][8]

En relaciones genealógicas del siglo siglo XIX aparece que Dácil fue la primera esposa del mencey Adjoña de Abona, y que tomó el nombre cristiano de Mencía Bencomo.[7][9] De esta unión nacerían cuatro niños, una de los cuales, Catalina Bencomo, se casó con el capitán de caballería Gonzalo del Castillo. Así, sería Catalina Bencomo y no Dácil, la persona en la que se habría inspirado Viana para el personaje de su poema. Catalina Bencomo, luego de su boda, sería apellidada Izquierdo del Castillo. Sus otros hijos fueron Juan, Elvira y María.[7][9]

Poema de Viana

Viana representa a Dácil como una mujer rubia y de ojos verdes que era considerada muy bella, siendo admirada por ello en toda la isla. A la llegada de los castellanos, Dácil estaba prometida a Duriman el Montañés. Sin embargo, el capitán de caballería Gonzalo del Castillo (a quien Viana denomina erróneamente como Fernán García del Castillo), se enamoró de ella. El oficial castellano fue hecho prisionero y puesto bajo el cuidado de la princesa para que ella pudiera sanar sus heridas, sufridas en batalla de Aguere. Según varios historiadores, Del Castillo fue un diplomático que dio algunos servicios tanto a los guanches como a los españoles, por lo que era bien considerado por ambos bandos y fue honrado con algunas estimaciones por el Rey de Taoro. Ambos hablaron y se enamoraron en este momento. Sin embargo, los rumores de que ellos habían hablado a solas, una práctica prohibida por la ley guanche, se extendió rápidamente. Duriman, que se sentía rechazado por la princesa, pidió que se formara el Consejo, el cual fue presidido por Bencomo y el gran sacerdote. Tras explicarles que Dácil había hablado a solas con un hombre que era, además, un castellano, y por tanto enemigo de su tierra y de su gente, Bencomo se vio obligado a encarcelarla para cumplir con la ley. Así, ella fue encarcelada durante varios meses. Sin embargo, más tarde, ella fue puesta en libertad gracias a unos testigos que pudieron engañar al rey de que los amantes nunca estuvieron a solas porque alguien estuvo con ellos. La princesa se casó con el conquistador en la Iglesia de la Concepción de Los Realejos. Luego fue bautizada como Catalina García Izquierdo o del Castillo. Tuvieron cuatro hijos: Diego, Luis, Pedro y María García Izquierdo. Viana no menciona el lugar ni la fecha en que ella murió.[1]

Véase también

Referencias

Plantilla:Reglist

  1. 1,0 1,1 Viana, Antonio de (1968) [1604]. Alejandro Cioranescu. ed. Conquista de Tenerife. Santa Cruz de Tenerife: Aula de Cultura del Cabildo Insular de Tenerife. https://hdl.handle.net/20.500.12285/mdcte/1105. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  2. Cioranescu, Alejandro (1970). «El poema de Antonio de Viana». Anuario de Estudios Atlánticos (Las Palmas de Gran Canaria: Patronato de la Casa de Colón) (16):  pp. 67-144. ISSN 0570-4065. https://revistas.grancanaria.com/index.php/aea/article/view/218/218. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  3. Rosa Olivera, Leopoldo de la (1950). «Égloga de Dácil y Castillo». Revista de Historia (San Cristóbal de La Laguna: Universidad de La Laguna) (90-91):  pp. 115-141. ISSN 0213-9464. https://hdl.handle.net/20.500.12285/revhistoria/540. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  4. Padorno, Eugenio (2009). «Nueva lectura de la "Égloga" de Dácil y el Capitán Castillo». Anuario de Estudios Atlánticos (Las Palmas de Gran Canaria: Patronato de la Casa de Colón) (55):  pp. 25-42. ISSN 0570-4065. https://revistas.grancanaria.com/index.php/aea/article/view/959/959. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  5. Cebrián Latasa, José Antonio (1996). «Revisando la Historia de Canarias». Estudios Canarios: Anuario del Instituto de Estudios Canarios (San Cristóbal de La Laguna: Instituto de Estudios Canarios) (41):  pp. 355-398. ISSN 0423-4804. https://hdiecan.org/biblioteca-virtual-iecan/estudios-canarios-anuario-del-iecan-41-1996/. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  6. Error en la secuencia de órdenes: no existe el módulo «Citas».
  7. 7,0 7,1 7,2 Bethencourt Alfonso, Juan (1992). Historia del Pueblo Guanche: Etnografía y organización socio-política. 2º Tomo. (2ª edición). San Cristóbal de La Laguna: Francisco Lemus Editor. p. 148. ISBN 84-879-7300-0. 
  8. González Espínola, Elías (1880-1881). «Antonio Viana» (PDF). El Museo Canario (Las Palmas de Gran Canaria: El Museo Canario) 2 (13-24):  pp. 335-339. ISSN 0211-450X. https://www.elmuseocanario.com/images/documentospdf/revistaelmuseo/Revistas/1880-1881%20Tomo%20II.pdf. Consultado el 18 de enero de 2025. 
  9. 9,0 9,1 Serra Moratín, Leandro (20 de diciembre de 1897). «Los Taoros o Tahodios». Diario de Tenerife: periódico de intereses generales, noticias y anuncios (Santa Cruz de Tenerife):  pp. 2-3.